Juan Francisco García Ramos - El Real de San Vicente, Toledo

Erika T.

Fui con mi hermano y la verdad quede muy satisfecha ya q el señor tuvo un lindo detalle al comprar muchas cosas nos dio obsequio. Y quede a gusto ya q estuve buscando por mucho tiempo un producto q tenía q ir a otro pueblo q queda a 45 minutos para poder comprar y lo eh conseguido aquí, me encanto la atención y la calidad de productos ahora más q han puesto productos latinos. No me sacan de hay.

Miguel T.

Es un estanco con mucha variedad de producto, venden de todo, lo que no encuentras en otro lugar seguro ahí lo tienen.

La H. D. P.

¡Comprar tabaco en otro sitio! literal, esa fue la contestación de su gerente, un tipo bajito y rellenito que estaba sentado en una silla detrás de un pobre mostrador. Un auténtico gruñón con más mala cara que otra cosa...
Comencemos por el principio porque esto solo pasa en las películas...
Entramos mi mujer y yo a comprar tabaco en una visita que estábamos haciendo a unos amigos en su pueblo y nada más entrar notamos un ligero malolor (una auténtica flatulencia era a lo que olía). Hacemos de tripas corazón y resulta que le pedimos varios artículos, tanto de tabaco como unos artículos que queríamos llevarnos de limpieza.
Le preguntamos al gerente y le costaba la vida contestar, eran tres sencillas cuestiones que le preguntamos y más que otra cosa nos estaba perdonando la vida o algo similar.
Al poco, detrás de mí se abre una puerta de forma abrupta y aparece otra persona por detrás mío, el susto fue tremendo pues no te esperas que salga alguien de repente.
Esta persona que aparece, según lo que pudimos entrever, parecía su esposa, pareja o similar. Esta persona en principio parecía de orígenes claramente latinos y su mala educación brillaban nada más hacer aparición, no soy una persona racista pero "su mujer" llegó como un elefante en una cacharrería para reporcharnos tantas preguntas que hacíamos sobre un producto tóxico, la indique amablemente que yo la estaba hablando con educación y que por mero respeto a nosotros como clientes debía de hablar en un tono más amable y sosegado y tuvimos que hacerla ver qué si un cliente te pregunta, tu que para eso tienes un negocio, tienes que ser educada y explicar lo que necesitemos como clientes.
Al ver que no nos rebajamos s su poco o nada nivel, les hablamos educadamente y sosegados y la mujer nos empieza a increpar y diciendonos que que raro era todo esto, en fin...debe de ser que no puedas preguntar pero bueno...sus hijos latinos hacen aparición por otra puerta y acercándose en modo matones latinK nos intentan amedrentar, como diciendo aquí estamos nosotros!!! De película como os decía, ivamos a gastarnos nuestro dinero y nos trataron peor que en una cárcel!!! Por supuesto déjanos todo lo que ivamos a comprar y nos íbamos a ir cuando el dueño, ese personaje bajito rellenito y con una camisa roida de la Expo del 92 con curro nos increpa diciendo que nada más entrar ya sabía que no ibamos a comprarle nada!!!
Ahora juzgar vosotros mismos o si sois lo suficientemente valientes id por ese estanco!!
Le tienen calado en todos los sitios pues fue preguntar en una tienda próxima y rápido nos pusieron al tanto, la pena fue no aver uso antes a la tienda, nos hubiéramos ahorrado tiempo, clase y disgustos!!! Espero que no os pase lo mismo!!!

Ivan G.

Fatal, mal trato y mal servicio, lo peor

Teresa R.

Excelente servicio 👍

Sandra S.

Raquel G.