Castillo de Haro - Villaescusa de Haro, Cuenca

Juan C. L. S.

Una verdadera lastima como se encuentra a día de hoy esta fortificación. Poco le queda de estar en pié, por desgracia, si nadie lo remedia.
Por lo demás, visita obligada si se encuentra en los alrededores ....

Álvaro C. M.

Impresionante su visión desde el camino, lástima que esté permanentemente cerrado y no se pueda visitar su interior.
En cualquier caso, muy sencillo y bonito.
Recomiendo su visita, aunque sólo sea por entorno y por el paseo que tienes que darte hasta llegar a el.

SALVADOR M.

Un lugar muy apartado, con mucha vegetación de pinchos... nada recomendado para los más pequeños. Cuestas muy inclinadas y entre los pinchos y las cuestas.. en agosto muchísima calor, llevaros mucha agua.. y lo malo y que no me gusta es que esta cerrado y no se puede ver por dentro. Una lástima que un castillete como este se valla a echar a perder sin poder visitarlo...

Antone V.

Saliendo de Villaescusa de Haro por la N-420 hacia el NE en dirección Cuenca, a unos 10 km, justo tras cruzar el río Záncara, a la izquierda hay una buena pista de tierra que en poco más de 1 km lleva hasta el castillo. A pesar de su estado ruinoso aún luce imponente y solitario en lo alto de un cerro que domina el valle. Es castillo cristiano del s XIII, pero su aspecto actual se debe a las reformas renacentistas del s. XV. A sus pies, a unos 100 metros corre el Záncara. Tanto el paseo para subir al castillo como el de la ribera del pequeño río son agradables.

Jörge

Castillo construido en el siglo XV sobre los restos de otro. Se mantiene gran parte de su estructura, habiendo sido restaurado. Su estilo es renacentista, y estaba rodeado de un segundo muro defensivo, del cual únicamente quedan los restos de sus refuerzos circulares. El castillo actualmente es propiedad privada, no se puede acceder a su interior, pero merece la pena acercarse y contemplarlo de cerca

Luis S.

Detrás de su pequeño tamaño, se esconde un castillo de gran importancia. Junto a él hubo en su origen una población ya desaparecida llamada Haro. Es curioso que el tiempo ha borrado hasta el más pequeño detalle de la extinta población, pero que sin embargo su nombre se haya conservado como apellido de otras cinco localidades de la zona. Las curiosidades no acaban aquí, su nombre está vinculado con la localidad riojana de Haro, ya que esta zona fue entregada por el rey Alfonso VIII durante la Reconquista a D. Diego López de Haro, Alférez Mayor de Castilla, perteneciente a la vizcaína Casa de Haro, quienes se habían convertido en señores de la villa de La Rioja tras su colaboración en la reconquista y repoblación, añadiendo el nombre de Haro a su linaje, con el que bautizarían doscientos años después a esta nueva localidad y castillo conquense ya en el siglo XIII (aunque el castillo que vemos es del siglo XV tras la restauración que hizo la Orden De Santiago).

Se encuentra elevado sobre una mota de muy inclinadas pendientes. Aparco el coche en la vertiente occidental que es la más próxima al edificio, pero me toca subir casi escalando, a cuatro patas. Cuando llego arriba puedo observar la restauración que hace pocos años el dueño actual ha realizado, aunque no se puede visitar el interior donde ha levantado una vivienda de nueva y moderna factura.
Eso si, las vistas están chulas.

Juanjo V.

Enclave histórico con encanto.
El castillo es del siglo XIII- XVI.
El paisaje es bonito.
El acceso es complicado si no se conoce el camino, ya que el cerro donde se encuentra tiene bastante pendiente y los dos senderos visibles son muy empinados.
Se agradecería al menos un cartel fuera con sus principales características, aunque sea privado.

Fernando L. A.

Peligrosa subida no lo recomiendo